Fui como viaje express a visitar el balneario de Panticosa. El balneario en sí es una pasada, tiene un montón de circuitos, es grande, limpio y fue en un horario que había poca gente. La piscina que tiene de exterior con vistas a las montañas nevadas es una experiencia increíble. Nos hospedamos en el hotel Gran Continental, la verdad que el servicio y la atención al cliente fueron excepcionales. La habitación no me terminó de convencer, la cama muy blanda y las almohadas más blandas todavía. Tema baño no está nada mal, vistas muy bonitas desde la habitación en la que estábamos. No se sentía muy aislado del resto de las habitaciones y almacenaje bueno. Había una pequeña ruta al lado del lago que pudimos hacer, y la verdad que estuvo muy bien. No la recomiendo para las personas que no puedan caminar muy bien, ya que eso es una pequeña ruta algo inclinada, lleno de rocas y zonas con agua (por peligro de resbalarse). Lo que sí que ofrecía el hotel, eran pequeñas excursiones o actividades si estabas hospedado, como excursiones con guía y otras actividades.

El lugar es bonito pero no ofrece actividades guiadas. El hotel necesita mantenimiento y el circuito termal es muy caro porque la única piscina que merece la pena es la externa, con vistas a la montaña. La carretera de acceso al balneario es muy estrecha y complicada y corres el riesgo de quedarte aislado en caso de nevada.

Entorno ideal para desconectar, pero el Hotel Continental es mediocre, no responde a la categoría que tiene y falta profesionalidad. Nada más subir a la habitación vi la bañera picada por todas partes y se apreciaban restos en los sanitarios de no haber limpiado en profundidad, me quejé y nos cambiaron de habitación. En la otra habitación se veía claramente el descuido en general y la falta de mantenimiento del hotel, los bordes de madera de la ventana y la repisa interior estaban podridos y bufados, las paredes estaban sucias, el plato de ducha y mampara anticuado... La peor experiencia fue en el balneario, ya que saliendo del circuito termal había un charco de agua que me hizo resbalar y la caída me ocasionó una lesión en un brazo, que un mes después perdura. Al parecer las empleadas estaban entretenidas hablando, en lugar de limpiar las zonas de agua o de señalizar para evitar este tipo de incidencias. Avisé en la recepción del balneario y ni se molestaron en preguntar cómo estaba o si necesitaba algo. El dolor fue a más y al día siguiente pregunté en la recepción del hotel, que se lavó las manos enviándome a la recepción del balneario, diciéndome que tenía la opción de esperar al médico cuyo coste era de 30 euros, que además tenía que asumir yo, o que podía ir al médico de Panticosa. Ha pasado un mes, ellos cobraron íntegramente la escapada y yo sigo con fisioterapia, antiinflamatorios y relajantes musculares (por fortuna no es rotura). El personal de restaurante muy amable y servicial. No volvería y no se lo recomendaría a nadie, prefiero la profesionalidad y la buena atención al cliente ante todo, no recibí ni disculpas y opté por no interponer reclamación... Lamentable.

Las instalaciones del Balneario son una pasada. Pero el servicio y aforo deja mucho que desear. Las termas de tiberio están muy llenas, en la piscina que está al aire libre no cabía un alfiler… el aforo debería ser reducido. Por otra parte, la señora que nos recibió en el spa deja mucho que desear, una atención pésima a la hora de “explicar las normas”, yo llevaba el móvil porque no sabía que estaba prohibido ir con el, lógicamente me apetecía llevarlo y hacer unas fotos de recuerdo. Entiendo que no se pudiese llevar pero las formas de pedírmelo fueron muy feas,se lo guardó en el BOLSILLO y a la hora de recogerlo,mi móvil (nuevo de hace 3 meses) estaba en una encimera al lado de unas jarras de agua, al alcance de todos los huéspedes sin ella estar presente. Creo que no es manera de guardar el dispositivo de un cliente. Habitación 3122 reserva a nombre de Jaime Díaz el día 11 de Mayo.

Leyendo las reseñas pensaba que me iba a encontrar algo peor... El balneario está bien, quizá la piscina interior un poco pequeña, lo mejor es la piscina exterior. Aconsejo llevar una toalla de casa para cambiarse en el vestuario ya que la que dan ahí acaba mojada. Las taquillas no es que no funcionen, el problema son las pulseras, en recepción te la cambian sin problema si no funciona la pulsera. Nosotros fuimos a las 15,30 y se estaba muy bien, quizá en otro horario esté más saturado.